|
Si necesita recoger, transformar y gestionar datos como parte de su trabajo, entonces también necesita pensar cuidadosamente acerca de la estructura de esos datos antes de comenzar a trabajar con ellos. De lo contrario, puede encontrarse en la situación de tener que reprocesar manualmente grandes cantidades de información, o incluso de ser incapaz de utilizar los datos para el propósito planeado.
Piense, por ejemplo, en un arqueólogo realizando una prospección de campo y registrando información acerca de lo que encuentra. Algunas preguntas muy sensatas que se podrían hacer antes de comenzar la prospección podrían ser:
- ¿Qué tipos predefinidos de cosas, tales como piezas, estructuras o yacimientos, debo considerar?
- ¿Debo también registrar cosas de otros tipos que no haya anticipado, como por ejemplo un topónimo interesante?
- ¿Qué propiedades (dimensiones, materiales, localización...) debo describir para cada uno de los diferentes tipos de cosas?
- ¿Qué nivel de detalle debo emplear para describir las cosas? Por ejemplo, ¿debo describir la localización de las piezas utilizando coordenadas 3D en centímetros, o basta con que haga una referencia al pueblo más cercano?
- ¿Qué relaciones entre cosas debo registrar?
- ¿Debo utilizar alguna terminología particular para que mis datos sean compatibles con algunos otros datos ya existentes?
Las preguntas como estas pueden ser respondidas creando un modelo conceptual de la realidad que creemos que nos vamos a encontrar, y después aplicando ese modelo a dicha realidad. El modelado conceptual es un conjunto de técnicas que nos permiten crear y perfeccionar esos modelos.
ConML es un lenguaje de modelado conceptual que ha sido construido desde cero con tres objetivos principales en mente:
- Facilidad de uso para los no expertos en tecnologías de la información.
- Simplicidad.
- Expresividad en áreas complejas, tales como las de humanidades.
Usando ConML, podrá crear modelos conceptuales y usarlos en su trabajo habitual. Para más información, por favor vea Recursos.
|